El titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, informó que la explosión registrada el fin de semana en Michoacán no corresponde a un “coche bomba” colocado para detonar a distancia, como se difundió inicialmente, sino a un vehículo ocupado por dos personas que ingresaron por su propia cuenta al sitio donde ocurrió el estallido.
“No fue un vehículo que hayan dejado y que después haya detonado; hay un conductor y una persona adicional que ingresan, se estacionan y el vehículo es cuando explota”, explicó durante la conferencia matutina.
“La camioneta viene de Colima… no se descarta ninguna línea de investigación”, puntualizó el funcionario. Recordó que el caso ya fue atraído por la Fiscalía General de la República (FGR), lo que permitirá abrir nuevas líneas de investigación y ordenar otros peritajes para determinar con precisión qué ocurrió.
Por otro lado, el titular de la SSPC aclaró que el uso de explosivos en esa región no es nuevo y se enmarca en una disputa entre grupos delictivos rivales.
“Este es una pugna entre un grupo afín al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y otro que son Cárteles Unidos”, indicó García Harfuch.
Explicó que el enfrentamiento involucra a dos cárteles específicos que mantienen una confrontación directa en la zona, y descartó que el estallido fuera un ataque dirigido contra la policía comunitaria.
Al preguntarle sobre si el incidente revela un fallo en los cinturones de seguridad y acciones de inteligencia instalados en el estado, García Harfuch aseguró que el Plan Michoacán continúa operando de manera integral.
“Cuando presentamos avances no es con una actitud triunfalista… es un plan que vamos a continuar fortaleciendo hasta que disminuyan estos índices delictivos”, dijo.
Claudia Sheinbaum señaló que lo ocurrido forma parte de la compleja situación de violencia en Michoacán.












