Los Dodgers no necesitaron de un hit productor para ganar y avanzar por séptima ocasiòn en los últimos 11 años a la Serie de Campeonato de la Liga Nacional de beìsbol.
Todo se definió en la entrada 11, cuando Orion Kerkering, relevista de los Phillies, dejó caer un roletazo de Andy Pages con las bases llenas y dos outs, y en un instante de pánico lanzó descontroladamente hacia el home.
La pelota pasó por encima de J.T. Realmuto, y el corredor emergente Hyseong Kim cruzó el plato para dar la victoria 2-1 a Los Ángeles, sentenciando 3-1 la Serie Divisional. El duelo había sido un testimonio de pitcheo de élite.
Tyler Glasnow, en su primera apertura de postemporada, fue intocable durante seis entradas: seis innings en blanco, dos hits, tres bases por bolas y ocho ponches. Su recta explotaba en la zona alta, su curva caía con precisión quirúrgica, y los Dodgers veían en él al as que habían esperado desde su llegada en el invierno de 2023.
Cristopher Sánchez respondió a la altura de las expectativas de Filadelfia: seis entradas sin permitir carreras, cinco hits, una base por bolas y cinco ponches.
El zurdo mantuvo a raya a la alineación de Los Ángeles con su combinación de recta y cambio de velocidad, convirtiendo cada turno en un desafío táctico bajo la luz tenue del estadio.
Cuando Glasnow salió tras la sexta entrada, con la multitud expectante, los Dodgers encontraron el camino para empatar. Alex Call recibió boleto, Kiké Hernández conectó sencillo al izquierdo y Sánchez fue relevado.
Durán entró, y tras un roletazo de Pages, Shohei Ohtani recibió boleto intencional y Mookie Betts, paciente como siempre, negoció una base por bolas con la caja llena, que empató 1-1 el encuentro.
El bullpen de ambos equipos intercambió ceros hasta que llegó la undécima entrada. Tommy Edman abrió con sencillo, fue reemplazado por Kim, y Max Muncy colocó corredores en las esquinas con un sencillo al centro.