México tiene un grave problema en materia de desapariciones; ya se ha roto la barrera de las 100,000 personas no localizadas y las cifras continúan aumentando.
En términos nacionales, el número de personas desaparecidas o no localizadas también es alarmante. Según cifras de la Red Lupa, en su Informe Nacional 2025 se estiman ya más de 131,000 casos en el país, lo que representa un incremento sostenido respecto a años anteriores.
De ese total, casi el 44.3% de los reportes se concentran en cinco estados: Jalisco, Estado de México, Tamaulipas, Veracruz y Nuevo León.
Las causas detrás de esta crisis combinan factores múltiples: violencia ligada al crimen organizado, desaparición forzada, trata de personas, deficiencias institucionales en búsqueda e identificación, y contextos sociales vulnerables.













